Este libro es uno de los primeros volúmenes de la colección Maestros de la fotografía en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, dirigida por el académico Publio López Mondéjar. A estos seguirán otros de Ramón Masats, Alfonso, Pérez Siquier, Santo Yubero y otros.
Figura mayor de la generación de los sesenta, el suyo es un universo intimista y atemporal. Ajeno al cambiante dictado de las modas, Gómez se recluyó en un espacio visual limitado y personal, para construir, honesta y calladamente, ese lenguaje despojado y profundamente original que le serviría para acceder a la poesía natural de las cosas más humildes –paredes desconchadas, ámbitos desolados, graffitis, objetos abandonados-, de la que hablaba Brassaï.
Textos de Antonio Muñoz Molina y Ramón Masats.